La Prevención de Riesgos Laborales se puede definir como el conjunto de actividades y medidas a llevar a cabo dentro de la empresa, con el fin de evitar o disminuir las posibilidades de que cualquiera de los trabajadores pueda sufrir algún tipo de daño derivado de su trabajo. Estos daños pueden ser tanto accidentes y lesiones, como enfermedades o patologías derivadas del desempeño de las tareas. A continuación vemos algunos ejemplos comunes.
La manipulación manual de cargas es una tarea bastante frecuente en múltiples actividades. Es responsable, en muchos casos, de la aparición de fatiga física, o bien de lesiones, que se pueden producir de una forma inmediata o por la acumulación de pequeños traumatismos aparentemente sin importancia.
De acuerdo con las normas del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, el peso máximo que se recomienda no sobrepasar (en condiciones ideales de manipulación) es de 25 kg. Asimismo, tal y como se puede apreciar en la imagen adjunta, dicho peso máximo recomendado va a estar también influenciado por la posición de la carga con respecto al cuerpo: cuanto más alejada se encuentre la carga del cuerpo, mayores serán las fuerzas que se generan en la columna vertebral y, por tanto, mayor riesgo de sufrir una lesión.
Para evitar dichas afectaciones musculoesqueléticas, se procurará manipular las cargas cerca del tronco, con la espalda derecha, evitando giros e inclinaciones y se realizarán levantamientos suaves y espaciados. Además, siempre que se pueda será preferible manipular las cargas cerca del cuerpo y a una altura comprendida entre el nivel de los codos y el de los nudillos -esto es, aproximadamente a la altura de las caderas-, ya que de esta forma disminuye la tensión en la zona lumbar. Cuando deban levantarse objetos desde el suelo se seguirán los siguientes pasos:
- Aproxímese a la carga, separe ligeramente los pies y flexione las rodillas.
- Incline ligeramente la espalda hacia delante manteniendo la columna alineada.
- Recoja la carga lo más cerca posible del cuerpo y vuelva a la posición derecha estirando las piernas y manteniendo la columna recta.
David Suárez
Fisioterapeuta