Parte de la sociedad se encuentra inmersa en una situación de teletrabajo desde mediados de marzo que, según las previsiones de las autoridades, se prevé mantener. Esto hace que se haya reinventado el concepto de oficina, llevando consigo una serie de beneficios y de dificultades.
Actualmente son unas 80.000 las personas que teletrabajan desde casa en Canarias, según un estudio reciente de la consultora Randstad basado en los datos del Instituto Nacional de Estadística.
Beneficios
- En el supuesto de tener el teletrabajador la libertad de administrar su propio tiempo, este tendría una mayor flexibilidad para organizarse y, consecuentemente, una mayor conciliación entre el trabajo y la vida familiar. Esta ventaja puede convertirse en desventaja si la persona no puede o no sabe gestionarse bien el tiempo, de modo que pueda llegar a alguno de los extremos: trabajar mucho sin prestar atención a las horas libres, lo que aumentará su cansancio y su estrés, o dejar que las labores domésticas o la exigencia de atención de los hijos robe el tiempo a la actividad laboral.
- La reducción de los desplazamientos diarios reduce a su vez los costes y el tiempo para tal efecto.
- También tiene ventajas para el medio ambiente, pues reducir el tráfico supone una disminución importante en los índices de contaminación de todas las grandes ciudades.
- Gastos generales reducidos para el empleador, al reducir la necesidad de espacios de oficina y gastos generales tales como calefacción, electricidad, etc.
Problemas
- Aislamiento social.
- Los problemas asociados a una falta de apoyo técnico pueden suponer una preocupación importante para los teletrabajadores.
- Progresión profesional. El hecho de no estar físicamente en la oficina puede hacer sentir al teletrabajador como poco visible o desfavorecido, puesto que puede no tener acceso con la celeridad que precisa a evaluaciones hacia su persona, compensaciones, conocimiento acerca de avances o atrasos en los objetivos de la empresa, etc.
- Sedentarismo. Si bien no tener que desplazarse puede ser considerado como una ventaja, la falta de movimiento que esto supone puede ocasionar con el tiempo lesiones musculoesqueléticas, disminución del gasto calórico (sobrepeso) y alteraciones del sueño (por disminución de la actividad física).
David Suárez
Fisioterapeuta
@dsuarui
