El 1 de julio comienza la época de peligro alto de incendios, por lo que el Cabildo de Gran Canaria, a partir de esta fecha, prohíbe el uso de fuego en montes y terrenos forestales. Las restricciones estarán vigentes hasta el 30 de septiembre aunque podrían extenderse en función de las condiciones meteorológicas.
A partir de este jueves queda restringido el uso de barbacoas portátiles en las áreas recreativas, zonas de acampada y albergues gestionadas por el Cabildo. En estos lugares solo podrán utilizarse las barbacoas de obra habilitadas para ello, así como las cocinas con bombonas de gas de menos de 13 kilos, siempre en el perímetro interior de cada una de las citadas infraestructuras.
Asimismo se prohíbe la quema de residuos forestales, agrícolas o de otra naturaleza, tales como rastrojos, leñas muertas, cortezas y análogos y la celebración de espectáculos pirotécnicos, la utilización de fuegos artificiales así como cualquier otro artefacto que contenga fuego en terreno forestal o en zonas próximas cuando por su trayectoria pudiera caer en terreno forestal.
Cuando el Gobierno de Canarias o el Cabildo insular declaren la “Alerta por Riesgo de Incendio Forestal” se prohibirá todo tipo de fuego en las zonas recreativas (incluido el uso de las barbacoas de obra instaladas en estas zonas), y los fuegos artificiales en terreno forestal y en una distancia de 400 metros a su alrededor.
En esas situaciones de Alerta, se restringirá completamente el uso, en terreno forestal y sus proximidades, de maquinaria que genere chispas, como radiales, motosierras, equipos de soldadura, desbrozadoras y análogas, y no se permitirá ni la actividad de carboneo ni el uso de fuego en la apicultura. En función de las condiciones meteorológicas la Consejería de Medio Ambiente podrá cerrar las infraestructuras de uso público que gestiona.
El Cabildo de Gran Canaria recuerda que la mayoría de los incendios forestales se producen como consecuencia de negligencias y actitudes de riesgo, por lo que pide a la población que contribuya a la prevención, extremen las precauciones y reduzcan al máximo el uso de fuego y elementos que generen chispas, para poder tener un verano sin incendios y sin víctimas.