Día histórico el que se vivía este sábado sobre la pista del Pabellón de A Cachada, en el regreso oficial del histórico CV Guaguas a la élite del voleibol nacional, ante un recién ascendido pero remozado Boiro, que contaba con el apoyo de la presencia de público en las gradas, en un encuentro de emociones a ambos lados de la red para todos los amantes al voleibol.
El CV Guaguas domina a placer la primera manga
Un error de Benavidez daba la primera ventaja del partido a los hombres de Sergio Miguel Camarero, pero Boiro mantenía el tipo ante los ataques grancanarios, con una buena recepción que les permitía mantenerse en el intercambio de golpes con un Pablo Kukartsev que no perdonaba en las inmediaciones de la red, sacando su prodigioso brazo a pasear cada vez que le brindaban la más mínima oportunidad.
Tras los primeros juegos de tanteo el Guaguas metía la directa, bien dirigidos por Paulo Renan, que llevaba en volandas a los suyos para que Hage, Kukartsev, Moisés Cezar y Matt Knigge derribasen el muro defensivo de los hombres de Emilio Palacio, que se veía obligado a solicitar el primer tiempo muerto del partido con un 11-18 en el electrónico de A Cachada.
Los cerca de 300 fieles que poblaban las gradas insuflaban ánimos a los suyos, mientras el técnico local intentaba reajustar su defensa para contener el arrollador ataque de los grancanarios que jugaban a placer haciendo gala de una gran recepción para desesperación de su rival, que sobrevivía gracias a la actuación de Moreno, que no podía evitar la derrota parcial en el primer set por 17-15 (0-1).
El CV Guaguas se asegura los puntos en el segundo asalto
Con la tranquilidad de haber entrado con buen pie en el partido, el Guaguas afrontaba el segundo set con un parcial de salida de 0-2 que les daba una primera ventaja que ya no abandonarían en todo el asalto, ante un Boiro que se estrellaba ante el juego coral de los grancanarios que en un abrir y cerrar de ojos obligaban a Emilio Palacio a solicitar un tiempo muerto con 3-8 en el marcador, buscando el remedio para terminar con la eficacia al saque de Hage.
Los gallegos intentaban reaccionar pero el Guaguas dominaba el partido con una eficacia aplastante en ataque y una seguridad en defensa y en la recepción ante la que se estrellaba el Boiro una y otra vez, obligando al técnico local a congelar nuevamente el partido con un preocupante 9-17 en el marcador que vaticinaba una nueva derrota parcial para los gallegos.
Boiro lo intentaba, pero Pablo Kukartsev aparecía en escena en el saque para finiquitar el segundo asalto con un parcial final de 0-5 que les daba el triunfo en el set por 15-25 (0-2).
Relajación isleña y reacción tardía de los boirenses
Con la soga en el cuello arrancaba el tercer set para el Boiro que veía como el Guaguas comenzaba a relajarse tras ponerse con un 3-6 en el electrónico, aprovechando el poderío ofensivo de Moreno para comenzar una remontada en la que comenzaban a quitarse los miedos y los nervios del debut de encima para ofrecer su mejor juego, amparados por el calor de una afición que nunca dejó de animarles durante todo el partido, llevando en volandas a su equipo hasta lograr ponerse por primera vez en el marcador en lo que va de encuentro (8-7).
Sergio Camarero solicitaba un tiempo muerto sensiblemente enfadado con la falta de concentración de sus hombres, que no terminaban de recuperar el dominio del que hicieron gala en los dos primeros sets, entrando el encuentro en un ida y vuelta en el que ninguno de los contendientes terminaba de romper el asalto.
El Guaguas lograba recuperar el mando en el marcador abriendo una pequeña brecha de 3 puntos que obligaba a Palacio a detener el partido en busca de soluciones (18-21), pero los grancanarios resistían ante el mejor momento del partido de los gallegos que no arrojaron la toalla hasta el final, cayendo en la tercera y definitiva manga por un ajustado 23-25, que daba la victoria final a los isleños por un claro 0-3, la primera en su ansiado retorno a la Superliga.
