Los empleados públicos temporales salieron de nuevo esta mañana a la calle para reclamar a la administración que valore su experiencia, les dé estabilidad laboral sin pasar por una prueba de libre concurrencia y acabe con el abuso de temporalidad en Canarias. En torno a un centenar de trabajadores de distintos servicios y administraciones se concentró este jueves en la calle San Bernardo en Primero de Mayo como un acto de protesta más en esta reivindicación.
Los empleados públicos temporales e interinos del Gobierno de Canarias iniciaron en diciembre de 2020 una huelga con carácter indefinido, que luego derivó en un paro de un día al mes para exigir que sus puestos se conviertan en fijos, sin pasar por un concurso de oposición, después de más de 15 y 20 años trabajando. Esta situación afecta a unos 11.000 trabajadores del Gobierno de Canarias.