El maltrato animal es uno de los delitos que más se ha incrementado en el Estado en materia de normativa medioambiental en los últimos años y de ahí la importancia de que los cuerpos de seguridad se doten cada vez de más herramientas para luchar contra estas infracciones, tal como se constató este jueves en la II Jornada Técnica sobre Maltrato Animal celebrada en el Teatro Municipal Juan Ramón Jiménez de Telde.
La concejala de Bienestar y Protección Animal, Auri Saavedra, fue la encargada de inaugurar esta jornada "con la que se pretende contribuir a la lucha contra el maltrato animal en Canarias" y que es una de las acciones impulsadas por las mesas de trabajo creadas por los 21 municipios y el Cabildo de Gran Canaria tras la firma del Pacto Insular por el Bienestar Animal suscrito en 2018.
"El maltrato no entiende de fronteras, sino de esfuerzos conjuntos y de sensibilidad", aseveró la edila del área. Por este motivo, todos los ayuntamientos de la isla están trabajando conjuntamente para, por ejemplo, unificar las ordenanzas municipales y poner en marcha campañas como 'Son familia', para concienciar acerca de la importancia de identificar a los animales de compañía con el microchip para evitar pérdidas y abandonos.
El capitán de la Guardia Civil y jefe de sección del Seprona de la provincia de Las Palmas, Germán García, aseguró que el maltrato animal es uno de los delitos que más ha crecido en los últimos años en materia de normativa medioambiental.
Durante su ponencia, que llevaba por título 'Actuación policial ante el maltrato animal', destacó que, si bien "la norma penal siempre va detrás de la demanda social, tanto en este como en otros ámbitos", el Estado ha ido avanzando para poner fin a estos delitos. Así, ya se actúa tanto en los casos de maltrato físico como el psicológico, como ha ocurrido recientemente en Lanzarote, donde se ha condenado a una persona por estos hechos.
Ante indicios de este delito, los cuerpos de seguridad deben comprobar el hecho, acudiendo con un veterinario siempre que se pueda, "ya que su informe es fundamental para determinar si hay algún tipo de lesión y cuantificar el grado de la misma", y valorar si es necesario incautar el animal, que es, además, la prueba de la infracción.
Por su parte, el policía local de Las Palmas de Gran Canaria Yeray López abordó en su intervención ('Aspectos de la inspección ocular y emisión del informe policial sobre el maltrato animal') la necesidad de dotar a los agentes de los distintos cuerpos de seguridad de herramientas para ampliar el campo de visión y poder detectar las señales de maltrato físico y psicológico. Y habló de señales de golpes o quemaduras, que son más evidentes, y de otras como factores etológicos como animales que dan vueltas sobre sí mismos o que tienen granulomas por lamido, que son conductas que pueden estar ocasionadas por estados de ansiedad provocados por los malos tratos.
La concejala de Bienestar y Protección Animal, Auri Saavedra, agradeció la colaboración especial de los ayuntamientos de Mogán y Santa Lucía de Tirajana, y del CSIF.