Hablando de propósitos...

Hablando de propósitos...

Estamos en el primer mes de este año 2022, llenos de impulso, con ganas de comernos el año y de hacer cosas diferentes. Todo eso que cada inicio de año, casi por inercia, nos proponemos y nos decimos: “Este año sí…”

¿Cómo sabemos si tenemos una vida con propósito? Empecemos por definir qué es eso.

Hay algunos autores como Sergio Fernández que lo define como 'vivir aportando valor al mundo'. Para Emilio Carrillo, consiste en 'aprovechar tus dones y talentos y que logres alinearlos con el propósito de tu vida'. Alfonso Rovira lo encontró en el voluntariado y los viajes porque eran su 'fuente de motivación'.

Uno de mis mentores decía que eso que haces y lo haces con tanto amor que el tiempo se te va rapidito y que, además lo harías aunque no te pagaran, probablemente luego llegarías a ganar mucho dinero por eso.

En definitiva, el propósito es una herramienta para una vida mejor, más feliz y más saludable, pero que muy pocas personas intentan y logran descubrir.

Descubrir ese propósito de vida es un tema de auto conocimiento y de auto observación. Es un viaje de introspección hacia uno mismo, re-descubrirnos de dentro hacia fuera.

Se han realizado varios estudios en la Universidad de California que han concluido que los adultos que viven con un propósito de vida más fuerte tienen una mayor longevidad que los que no lo tienen o tienen un propósito de vida más débil. Estos estudios también demostraron que el riesgo de morir era dos veces mayor entre las personas que carecían de un propósito de vida.

Científicamente aún no se comprende cuáles son los mecanismos que activan la conexión entre el propósito y el bienestar. Sin embargo, tener un mayor significado en tu vida puede disminuir la liberación de la hormona del estrés, fortalecer el sistema inmunológico del organismo y permitir que se liberen mayormente las hormonas de la felicidad como la serotonina, la oxitocina y dopamina.

Tener un propósito en la vida nos ayuda a tomar mejores decisiones y, sin duda, nuestra salud depende de sentirnos comprometidos con la vida.

¿Qué diferencia existe entre una vida con propósito y una vida productiva?

Muchas veces confundimos el propósito de nuestra vida con la productividad, porque estamos muy educados en el hacer y si no hacemos sentimos que no avanzamos. La gran diferencia entre ambas es que la productividad está orientada a los resultados y el propósito está orientado al proceso. La productividad se centra en el uso de nuestro tiempo y esfuerzo, mientras que el propósito se basa en que nos sintamos comprometidos con lo que estamos haciendo, independientemente del resultado que podamos obtener.

Tres claves para descubrir tu propósito:

  1. Presta atención a los halagos que te hacen. Es difícil a veces saber las cosas que nos apasionan. Lo mejor de todo es que otras personas pueden darnos pistas y ayudarnos a descubrirlo a través de los elogios que nos hacen. Cada vez que nos hagan un cumplido pregunta y pregúntale a esa persona qué lo ha motivado a acudir a ti para exponerte o decirte lo que te ha compartido y empieza a hacerte más consciente de tus habilidades y actitudes.

  2. Presta atención a lo que te interesa. Qué tipos de cuentas sigues en las redes sociales, qué tipo de lecturas son las que captan más tu atención, qué clase de películas o series son las que te atrapan, de qué te gusta conversar, qué temas de conversación te cuentan más tus amigos, etc. Todo esto nos ayuda a descubrir y a encontrar pistas para saber qué nos apasiona, cuál es la esencia de la vida que nos mueve y nos motiva.

  3. Piensa: ¿Qué crees que deberías cambiar? Hay personas que desde muy temprana edad tienen claro su propósito, bien porque los mueve una causa social o algún tema en particular y que se les da de forma casi  natural. También puede ayudarte hacerte preguntas como: ¿Qué harías si no tuvieras que trabajar para ganarte la vida? ¿Qué elegirías hacer incluso en días conflictivos? ¿Qué te encantaba hacer cuando eras niño? Si tuvieras tiempo, ¿qué te gustaría aprender o crear? Todas estas preguntas te pueden guiar hacia lo que realmente le daría sentido a tu vida. Encontrando ese significado vas descubriendo tu propósito.

Para finalizar este articulo quiero compartir una frase que al practicarla nos puede ayudar a vivir una vida con propósito:

“AMA LO QUE HACES HASTA QUE HAGAS LO QUE AMAS”

 

Kary Piloto

Coach y Mentora en Auto-Gestión Emocional

@karypiloto_mentora