Nace el Ciclo Formativo de Grado Superior en Vitivinicultura
El objetivo es potenciar el sector agroalimentario de la Isla y de crear un nicho de empleabilidad en el ámbito vitivinícola
“En un sector tan competitivo como el vitivinícola, la formación era un reto. Era absolutamente imprescindible que eleváramos el nivel técnico y profesional de las personas que trabajan en nuestras producciones y elaboraciones”, ha asegurado hoy, en la Bodega Insular, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, durante la presentación de la nueva oferta del Ciclo Formativo de Grado Superior en Vitivinicultura.
“El Cabildo de Gran Canaria desarrolla en torno al vino un enorme programa de trabajo, apoyando a los productores, colaborando con las asociaciones, y reforzamos la proyección comercial de nuestros vinos, entre otras muchas acciones”, ha cotinuado Morales. “Tenemos entre nuestras prioridades luchar por el Sector Primario y por la Soberanía Alimentaria, para alcanzar esa cifra que plantea la FAO de producir el 50% que necesitamos para alimentarnos, y el fomento de la viticultura en esas claves es esencial”.
El Ciclo Formativo de Grado Superior en Vitivinicultura ha nacido auspiciado por el convenio de cooperación suscrito por la Institución Insular con la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, y con el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de Gran Canaria, con los objetivos de potenciar el sector agroalimentario de la Isla y de crear un nicho de empleabilidad en el ámbito vitivinícola.
En el acto han estado presentes la consejera regional de Educación, Manuela de Armas; el titular de la Consejería insular de Sector Primario y Soberanía Alimentaria, Miguel Hidalgo; y el presidente de la Federación Insular de Asociaciones del Sector Vitivinícola de Gran Canaria, Pedro Suárez. Todos ellos han puesto en valor la relevancia de esta oferta de formación, que se impartirá en el IES Vega de San Mateo, en los espacios y equipamientos de la Bodega Insular que ha cedido la Corporación grancanaria y en fincas e instalaciones que ha facilitado el sector, que ha mostrado un alto grado de implicación, para que el alumnado conozca de primera mano las labores, técnicas y procesos de cultivo y vinificación.
En concreto, el Cabildo, a través de la Consejería de Sector Primario y Soberanía Alimentaria, ha puesto a disposición del Gobierno de Canarias el área de administración del inmueble, que cuenta con salas de exposición y venta, espacios para reuniones y despacho de gerencia; así como un aula de formación y el laboratorio. Todas estas instalaciones han sido acondicionadas y dotadas, para cumplir con las condiciones exigidas por la normativa para el desarrollo de la actividad. En ese contexto, cabe indicar que se ha ampliado el uso de trasformación industrial que tenían, para añadir un sub-uso de docencia, como permite el Plan General de Ordenación de San Mateo.
La Corporación Insular secunda y apoya así la iniciativa del Gobierno canario, y continúa consolidando sus objetivos de recuperar el sector primario y de preservar el paisaje agrícola, para favorecer la economía circular y el consumo de los productos de la tierra y, en este caso, de los vinos de Gran Canaria. Una política que coincide con la filosofía de este proyecto, con el que el Ejecutivo regional pretende completar la oferta formativa y proporcionar titulados especialistas a un sector vitivinícola que, en el contexto socioeconómico actual, ve cuestionada la viabilidad de sus explotaciones y su sostenibilidad a medio y largo plazo.
De hecho, los últimos datos recogidos de la vendimia de este año de la Denominación de Origen Vinos de Gran Canaria vaticinan que, a falta de los resultados de algunas bodegas y del cierre de la cosecha anual de San Mateo, esta será la peor temporada desde 2011 y corroboran la tendencia a la baja que registra la producción del sector, en el último quinquenio.
No obstante, y si bien es cierto que, según los diagnósticos del Gobierno de Canarias y del propio Cabildo, la producción ha sido baja en los últimos años debido a cuestiones climáticas, hay que recalcar que Gran Canaria, gracias a las redes de riego que se están creando en zonas de medianías y cumbre, es la única isla que mantiene estable el número hectáreas en cultivo en la última década, mientras que se ha reducido en el resto del Archipiélago.
En este escenario y dada la necesidad de formar a profesionales vitivinícolas que contribuyan a reactivar la actividad, se pone en marcha este ciclo formativo , que consta de 2.000 horas lectivas, distribuidas entre dos cursos oficiales de 30 horas semanales durante cinco trimestres y un trimestre más de prácticas en empresas.
Las y los alumnos recibirán formación en dos módulos profesionales. El primero versará sobre viticultura, vinificaciones, proceso bioquímicos, análisis enológicos, legislación vitivinícola y seguridad alimentaria, formación y orientación laboral, e inglés. En el segundo, se impartirán materias de estabilización, crianza y envasado; industrias derivadas; cata y cultura vitivinícola; comercialización y logística en la industria alimentaria; gestión de calidad y ambiental en la industria alimentaria; empresa e iniciativa emprendedora y proyecto en la industria vitivinícola, junto a 356 horas de prácticas en centros de trabajo, que se realizarán durante el primer trimestre, para que coincidan con la vendimia.
Estas competencias capacitarán a las y los nuevos profesionales para organizar, programar y supervisar la producción en la industria vitivinícola, mediante el control de la producción vitícola y las operaciones de elaboración, estabilización y envasado de vinos y derivados, así como la aplicación de los planes de producción, calidad, seguridad alimentaria, prevención de riesgos laborales y protección ambiental, de acuerdo con la legislación vigente .