Manrique de Lara: “Hemos detectado una preocupante deslealtad del Gobierno de España hacia Canarias”
El presidente del Círculo de Empresarios de Gran Canaria hace balance en esta entrevista del año que termina y esboza sus previsiones para el 2021. Agustín Manrique de Lara, además presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, confía en tener “dentro tres años cifras pre-Covid, para lo que se debe activar un plan de recuperación, especialmente para el turismo, que aporte liquidez a las empresas”
Al finalizar el 2019, el Círculo afirmaba que el nuevo año traía muchas variables desconocidas que amenazaban la economía canaria, como el estancamiento político, la desaparición de Thomas Cook, la constante preocupación por el Brexit… y si era poco todo esto, emergió la variable jamás imaginada. ¿Qué reflexión sacan de todo lo que hemos vivido?
Todas esas incertidumbres siguen latentes, están anestesiadas como nuestra economía. Son variables, por tanto, que volverán a surgir cuando pase la pandemia y nos pongamos a caminar. Esos males previos a esta crisis sanitaria se verán agudizados precisamente por esta situación, como el Brexit que no sabemos cómo se va a solucionar.
La sensación que sí tenemos todos es que terminamos el año con una enorme incertidumbre. Y esa es la peor palabra que puedes ponerle a un proyecto empresarial. Todos trabajamos para tener escenarios estables y ciertos y las variables que no controlamos complican mucho la confianza, la inversión y la capacidad de recuperar esta situación. A medida que seamos capaces de ir aportando certidumbre a los problemas actuales podremos avanzar. La vacuna y los procedimientos sanitarios son un gran paso.
¿Cuándo saldremos de ésta? ¿Y cómo lo haremos?
La iremos superando a medida que sepamos controlarla. Esta variable sanitaria la tendremos ya siempre incorporada en todas las previsiones que hagamos, porque es algo que puede volver a repetirse.
Cuando la vacuna se estandarice y tengamos tratamientos que curen, tendremos una situación más cómoda, pero no habremos salido de esto. Los efectos económicos son muchos. También sobre la forma de entender las cosas o de afrontar el futuro. Una nueva forma de actuar que debe hacernos más competitivos.
A lo largo del 2021 creemos que vamos a empezar a recuperar el tono económico. Será en verano cuando el turismo comience, de forma lenta y progresiva, a recuperar su actividad.
¿Cómo valora la actuación gubernamental?
La forma de actuar de los distintos gobiernos ha sido muy diferente. Canarias lo ha hecho bien. Cuando hemos tenido un problema nos hemos unido todos: organizaciones empresariales, sindicatos, Gobierno, oposición… hemos creado una piña en torno al presidente del Gobierno para apoyarle y darle fortaleza en su capacidad de interlocución, básicamente con el Gobierno de España.
En el ejecutivo nacional nos hemos encontrado una situación radicalmente diferente. Mismo color, misma composición, pero con una forma de actuar muy diferente. La crispación ha dominado estos meses. Se trata de un gobierno, además, preocupado continuamente en garantizar su continuidad con unos grupos heterogéneos que le hacen chantaje a diario. Canarias en esa ecuación no tiene ningún peso y hemos detectado una tremenda deslealtad desde Madrid hacia las Islas. No han tenido sensibilidad.
A nivel global hemos visto países con los que me siento más identificado y que han afrontado la pandemia tratando de apoyar el sector empresarial. Han aportado liquidez, a diferencia del estado español que ha hibernado la economía. Es el caso de Alemania que ha luchado para que las empresas no pierdan fuerza y se ha comprometido a compensar con el 75% de la facturación del mismo mes del año anterior a aquellas empresas que tienen que parar por motivos sanitarios. Y eso le ha dado una gran fortaleza económica.
Ya han solicitado en diferentes ocasiones un plan de recuperación específico para Canarias, ¿qué debe contener ese plan? ¿Es necesario un plan de rescate concreto para el turismo?
Hay un plan que surge de un pacto en Canarias que hemos suscrito prácticamente todos los agentes económicos y sociales, con el apoyo del Gobierno y los principales grupos de la oposición. Un plan amplio y creíble, con partidas presupuestarias que lo respaldan. Y que incluye aspectos fundamentales como la simplificación administrativa.
Este plan choca con lo que dispone el Gobierno de España para Canarias. Hay aspectos que salen por unanimidad, como la adaptación de las herramientas del REF a las condiciones económicas derivadas de la pandemia. Como todo lo que tiene que ver, por ejemplo, con retrasar un año la materialización de la RIC dotada en 2016. Aspectos tan sencillos como estos y que han conseguido sin problema otras comunidades con sus fueros, como es El País Vasco y Navarra, y a nosotros se nos niega. Esto causa una preocupante desafección con respecto al Gobierno de España, una triste sensación de abandono.
Hemos detectado una divergencia entre Canarias y la media nacional en datos macroeconómicos. Hemos perdido en términos interanuales un 20% del PIB frente a un 8,7% en la media nacional. Los impuestos netos caen en las Islas un 19,35% frente al 11,3% en el resto del país. El paro registrado en Canarias es del 29,10%, en España es del 18,65%. Del total de los ERTEs nacionales, el archipiélago tiene el 10,8% del total, cuando nuestro peso está en torno al 4,5%, por lo que duplicamos el número de personas en esta situación de lo que debería correspondernos.
Son cifras que preocupan además porque no nos dan herramientas para converger de nuevo y las herramientas que tenemos para compensar las deficiencias estructurales, nuestros fueros, REF y estatuto, no se están respetando. Echo en falta que los senadores y diputados canarios en Madrid defiendan esas medidas que afectan a su comunidad, al margen de siglas políticas. Echamos de menos un foco sobre Canarias. Entiendo que no hay mala fe de Madrid hacia Canarias, pero sí un profundo desconocimiento.
¿Qué indicadores o datos le gustaría alcanzar durante el 2021 para visualizar la recuperación?
El primer indicador que todos queremos ver es el de la recuperación del empleo que ahora se sitúa, en realidad, en torno al 40%. Queremos empezar a deshacer ERTEs y a recuperar tono de actividad económica, especialmente en el turismo. Es algo que se puede hacer con relativa agilidad. Si empezamos a recuperar los visitantes el próximo verano, en tres años podemos ser capaces de tener cifras pre-Covid, pero para eso hay que hacer deberes, como el plan de recuperación para el sector que incluya apoyo económico.
Las empresas turísticas llevan casi un año sin facturación y la gran mayoría soportando los costes de la seguridad social. La recuperación de este sector puede derramar economía a los demás sectores de las islas.
Muchas de esas medidas no tienen que ver con recursos públicos, necesitamos un marco donde se pueda aplicar con claridad el REF, que nadie toque nuestros fueros, y que se de apoyo de liquidez a las empresas. Necesitaremos además estímulos a la demanda y, a partir de aquí, seremos capaces de recuperar el tono inversor y la actividad económica en Canarias.