El Molina AC Gran Canaria acaba sexto de Europa
Los grancanarios finalizan su primera participación en la máxima competición continental con un digno sexto puesto tras caer ante el Dubnica Wild Kings eslovaco en el partido por el quinto lugar
El debut en lo más alto fue complicado, pero el Molina AC Gran Canaria ya ha escrito su nombre en Europa. La actuación del combinado insular en esta Copa de Europa 2021 ha sido excelente, siendo capaz de competir contra todos los equipos y quedándose a medias sólo por pequeños detalles. Aun así, el sexto puesto cosechado en Kaltbrunn es la primera piedra para construir pensando en el futuro, un futuro continental en el que quiere estar el Molina.
Espadas en todo lo alto
El alto ritmo sería protagonista de un partido que empezó con mucho frenesí. Tanto Molina como Dubnica quería ese quinto puesto que estaba en juego y ninguno bajó la guardia en busca de los goles, que fueron cayendo por su propio peso con mucha facilidad. Los amarillos fueron los primeros en ponerse por delante, pero los eslovacos dieron réplica rápido para evitar escapadas.
Uno tras otro se fueron sucediendo los tantos. Aun así, el Molina siempre mantivo cierta ventaja sobre la que se sentía cómodo, pero no sería suficiente. El Dubnica logró el empate al filo del descanso y nuevo partido se abría en la segunda parte para ambos. Como ya sucediese ante el Vicenza, el que parpadease iba a verse abocado a sacar el puck de su portería seguro (5-5).
Un gol en el último suspiro evitó la prórroga
Tras el descanso, el Dubnica apretó tuercas y pudo ponerse por delante. Pese a ello, el Molina respondió siempre bien y no dejó a los eslovacos estar cómodos. Pese a la experiencia del cuadro de Eslovaquia, los isleños siempre estuvieron ahí para seguir en partido, peleando y compitiendo a gran nivel.
A 3 minutos del final un tanto de Pablo Perera puso al Molina con su máxima ventaja del partido (9-7). Era momento de cerrar la portería que estaba defendiendo el joven David González y saber jugar con el reloj. El quinto puesto estaba en juego y los eslovacos no iban a rendirse de forma sencilla.
Sin embargo, el Dubnica fue capaz de remontar. Primero recortó distancias, a 30 segundos del final puso el empate y con la bocina a punto de sonar marcaron su décimo y definitivo tanto, dejando al Molina otra vez con la miel en los labios. Se le escapó por poco a un Molina que compitió genial (9-10).