El CH Molina Sport culmina su venganza ante el Metropolitano CP para meter quinta
Los grancanarios suman 5 victorias consecutivas y se mantienen en lo más alto del Grupo 1 de la Liga Élite tras derrotar al Metro (7-4). Fabian Mörschler y Jacob Tenemyr con 2 tantos cada uno fueron los máximos goleadores de la noche en un duelo de máxima intensidad
Primer encuentro de la segunda vuelta en el Grupo 1 de la Liga Élite que enfrentó al líder y al tercer clasificado tras la victoria vizcaína (6-2) de la ida en el Polideportivo de Zorroza.
Igualdad en el arranque
Tras unos primeros minutos de tanteo con ambos equipos buscando minimizar los errores para evitar las concesiones al rival, llegaron las primeras oportunidades. Pawel Zasadny probó el primero a Filip Petric, el guardameta visitante, en un dos contra uno, pero encontró una respuesta positiva.
El Molina Sport buscaba con ahínco la portería rival según avanzaba el juego, aunque la suerte no le acompañaba con dos tiros al palo en los primeros 5 minutos. La posesión y, sobre todo las ocasiones, ya eran mayoritariamente amarillas.
El gol llegó finalmente con Pawel en la izquierda amagando el tiro y buscando el pase a Jacob Tenemyr, que reaccionó rápidamente a un control que parecía marcharse largo detrás de la portería, para empujarla en el segundo palo sin dar tiempo a Petric para llegar (1-0, minuto 7).
No permitió el equipo grancanario la reacción visitante. Pawel se encontraba de nuevo con el portero del Metro, pero Pol Jansà aprovechaba el rechace para anotar el segundo tras darse la media vuelta y definiendo con la precisión necesaria para encontrar el hueco por debajo de la pierna de Petric (2-0, minuto 10).
Vendaval amarillo
Sin solución de continuidad, el Molina buscó recuperar el puck tras el saque del rival para lanzarse a por el tercero, y así lo hizo. Fabian Mörschler superó al guardameta checo a la segunda con un toque suave a bocajarro (3-0, minuto 11).
Así el resultado, llegaron las primeras superioridades, una por bando, aunque sin que las pudieran convertir en goles. No se rindió el cuadro vasco, que pareció encontrarse cómodo por primera vez en el tramo intermedio de la primera mitad.
El norteamericano Stephan Davis aprovechó el rechace de Adam Schejbal a un tiro lejano de Asier Arpon y definió elevando el puck con mucho tacto para estrenar el casillero visitante (3-1, minuto 17).
La ventaja de dos goles abría de nuevo el resultado y el juego volvió a desenvolverse en torno al respeto mutuo inicial al menos por un instante en una fase con menos ocasiones.
Iván de las Heras devolvió la tranquilidad al Molina con un golazo por el centro tras dejar atrás a dos defensores y definir engañando a Petric (4-1, minuto 20). El líder del Grupo 1 parecía tener controlado el duelo, aunque el trabajo visitante se mantenía a nivel alto de intensidad.
Los de Andreu Tomàs buscaban llegar al descanso con la ventaja de tres goles, pero Ibai Aranzamendi lo impidió tras una gran conducción y colando el puck entre las piernas de Adam (4-2, minuto 24).
Todo por decidir
La primera mitad terminó con el Molina lanzando a portería tres veces por cada una del Metropolitano, pero el resultado no permitía la relajación y el paso por vestuarios frenó el ritmo endiablado con el que se acabó el periodo inicial.
Fabian por la izquierda probó fortuna por el palo de Petric en un lanzamiento muy complicado que coló por un hueco minúsculo (5-2, minuto 29). Goleaba así por segunda vez en el choque. El sexto podría significar un final plácido y el Molina se puso a ello de inmediato.
Los porteros, ambos checos, dejaron actuaciones de muchísimo nivel dificultando el trabajo de los atacantes rivales hasta que Israel Olivenza aprovechó un error en el medio para encarar a Adam y batirlo (5-3, minuto 34). El Metro volvía a la vida.
El choque ganaba en intensidad a medida que pasaban los minutos y el cuadro visitante se vio mermado con dos exclusiones consecutivas, circunstancia que acabó aprovechando el anfitrión. Andreu Tomàs definió con puntería un buen cambio de lado de Jacob Tenemyr con el rival a unos pocos segundos de recuperar la igualdad numérica (6-3, minuto 38).
Las faltas se sucedieron en el tramo final del choque sin que hubiera más juego de 5 contra 5. El tanto de Enero Darkistade a 5 minutos del final permitía soñar por última vez al Metropolitano (6-4, minuto 44), pero Jacob respondió rápidamente para sentenciar la contienda (7-4, minuto 45).